para Ani
Nulo es mentar la pena que me embarga
del aprender a vivirme sin tu vida:
tu eres de los que jamás se olvidan;
como un viento que sopla a las espaldas.
Te he forjado en mi fe, del ser dos almas
en las buenas vivencias compartidas.
Si es alegre, más leve es la partida;
que así nos sea ligera la carga.
Si la existencia te da malos tragos
no andes solo rumiando los estragos;
la fuente de agua clara y alegría
se encuentra en cada paso que da el día.
Llevo conmigo éste verso de guía;
mismo camino son todas las vías.